Reseña: La muerte y sus ventajas

 “La ciencia para todos”
Marcelino Cereijido y Fanny Blanck Cereijido

Marcelino Cereijido y Fanny Blanck Cereijido nos presentan un libro “La muerte y su ventajas” de la colección “La Ciencia Para Todos”. Los autores nos hablan acerca de los organismos, células, etc. de nuestro cuerpo que simplemente mueren por si solas. Cabe resaltar que se encuentran una serie de analogías que los autores hacen a lo largo de todo el libro, sirviendo de ayuda al momento de detenerse en punto difícil de comprender.

Contiene 6 temas, de ellos se destaca la siguiente información:

“I.- La muerte de las células”. Los organismos como las bacterias, levaduras y amebas, se constituyen por una sola célula. Desde luego se sabe que se logra eliminarlos con antibióticos pero además se pueden morir por causas ajenas a su funcionar biológico; normalmente un organismo unicelular no muere: cumplido su ciclo vital, simplemente se divide en dos organismos que continúan viviendo, sin dejar “cadáver” alguno. Las células contienen extensas moléculas de ADN, enroscadas una sobre otro, y contiene moléculas llamadas Adenina, Timina, Gitocina y Guanina. El ADN tiene codificados los genes que especifican los péptidos que los ribosomas habrán de fabricar. La célula tiene luego todo un aparato de organelos subcelulares y enjambres de enzimas que actúan sobre los diversos péptidos, convirtiéndolos en proteínas que controlan todas las reacciones químicas de las que depende la vida y constituyen piezas clave del andamiaje y maquinaria celular. Todas las células somáticas de un organismo tienen un genoma idéntico, es decir, todas tienen genes que codifican las mismas proteínas. Existen genomas que se eliminan y otros que se conservan. Cuando una célula se desconecta de las demás y no recibe del resto del organismo la confirmación de que todo marcha bien, enciende sus genes de la muerte y se inmola.

 “II.- La muerte de los organismos”. Algunos se opusieron a la teoría de que los organismos mueren porque sus células dejan de multiplicarse. Además la manera de medir la mortalidad es determinar cuánto tardan los organismos de una generación dada en reducir su número a la mitad o en extinguirse del todo, y describir así una llamada "curva de sobrevivencia". Otra es representar la cantidad de individuos por edades. Muchos organismos pueden procrear varias camadas de hijos a lo largo de su vida, pero otros, llamados semélparos, sólo lo hacen una vez. Existe diversidad de hipótesis acerca de la vejes y la muerte, pero casi todas las hipótesis tienen un cierto grado de validez; he aquí algunas como: Agotamiento de sustancia vital, Uso y ruptura, Velocidad metabólica, Errores metabólicos, Radicales libres, Acumulación de desechos, entre otras más.

“III.-La muerte de los seres humanos”. Galeno al disecar varios tipos de animales comprobó que son muy similares al hombre en vísceras, músculos, arterias, venas, nervios y huesos. Esas similitudes permiten que hoy sepamos cómo funcionan nuestras neuronas por investigaciones hechas en animales, tales como: el calamar y el caracol. La muerte humana no se puede estudiar experimentalmente. A medida que la medicina y las normas de seguridad vallan mejorando, casi todos los niños nacidos y desde luego los adultos, podrán escapar de una muerte prematura; ya no morirán jóvenes. “La salud pública y la medicina sólo son una parte del esfuerzo que hace el ser humano por mantenerse joven y sobrevivir […]”. Los progresos en la ciencia no lograran hacernos inmortales, sino que permitirán que casi todos los nacidos lleguen a ser viejos.

Más que nada los primeros 3 temas se relacionan con la especificación de los factores que influyen en la muerte de una célula, siguiendo por como sucede lo mismo en los organismos y terminando con algo mucho más complejo, como lo es el cuerpo humano.

“IV.- Psicología del envejecimiento”. A medida que transcurre el tiempo, el individuo va atravesando etapas donde no sólo madura y envejece sino que también es capaz de observar el envejecimiento propio y el ajeno, meditar y reaccionar frente a la muerte de sus semejantes y la propia. Las características fundamentales del sentido temporal son: se nace con procesos y conductas cíclicas (que se repiten a lo largo del tiempo), la noción del tiempo que maneja una persona va cambiando con su edad, la humanidad ha ido cambiando su concepto del tiempo a lo largo de la historia, los distintos sujetos tienen diversas nociones de tiempo y por último, es que la sensación de que hay un tiempo que fluye sólo rige en el nivel consciente. La senectud es un periodo que va desde el momento en que un organismo cesa de reproducirse, hasta que muere, por eso, la vejez es la suma de la senectud biológica y de las consecuencias psíquicas del percatarse de que la muerte se va acercando.

“V.- El papel de la muerte en la vida psíquica”. Desde el comienzo de la historia, el hombre se a angustiado ante la certeza de que no podrá escapar de la muerte; esa angustia se ha ido enriqueciendo con la meditación de poetas y filósofos, literatos y dramaturgos. El ser humano, en lugar de tener instintos como los animales,  se le llama pulsiones, porque están ligadas a la experiencia y deseos del sujeto. Freud describió la pulsión de vida como un interés por construir entidades más y más complejas, y reservó el nombre de pulsión de muerte para designar la tendencia a disolver complejidades y a destruir objetos o al mismo sujeto. “Para el niño la muerte es siempre la muerte de otro, para el adulto maduro la muerte de otro siempre refiere a la propia […]”

“VI.- Y tú, ¿Qué edad tienes? Esta es una de las preguntas que se le hacen a un paciente para ver si no ha perdido la razón y conserva algo de su identidad. Se daba tan poca importancia a la edad en Estados Unidos antes de 1850, que en los censos federales no se incluía información específica sobre ella. La edad se consideraba un fenómeno biológico, no un atributo social, ni siquiera la muerte estaba relacionada con la edad. Pero a fines del siglo XIX, varias circunstancias iniciaron un proceso de estratificación social por edades.  El libro dice que “Según Martin Kohli la edad servía en primer lugar como racionalización de las funciones sociales. En segundo, ayudaba en el control social. En tercero, la edad introducía un mecanismo para determinar el acceso a ciertas posiciones, el cual resultaba más preciso que determinar si una persona ya estaba "preparada" biológica, educacional y emocionalmente […]. Por último, la especificación de la edad pasó a funcionar como un método de integrar a una persona a los múltiples papeles y responsabilidades que un individuo debe asumir en la sociedad moderna […]”. Vivir implica reconocer que las cosas de la vida son por un instante y que hemos de pasar por un indefinible número de pérdidas. “Martin Heidegger argumenta que el Ser es un Ser-hacia-la-muerte (Sein zum Tode) y por eso el ser implica ansiedad”.

Finalmente da por terminado con todos los temas y a partir de este punto lo siguiente del libro son 9 apéndices, que por mi parte son un extra del libro pero no innecesarios, ya que hablan de ciertos temas de curiosidad, además que contiene pensamientos de algunos personajes sobresalientes, tales como: Woody Allen, Richard Bach, Coco Chanel, Pitágoras, entre otros más.

Sin duda es un excelente libro para las personas atraídas por el ámbito de la biología. Y a pesar de ser un libro no actualizado posee información relevante e interesante sobre aquello que desconocemos del mundo en el que vivimos.